DE LA QUERENCIA...

BASKET CARTAGENA: 65

UCAM MURCIA-96: 50

Río Tabeirós

Podríamos afirmar que es del todo normal o natural esa tendencia que tenemos los animales, racionales o no, a regresar al lugar de donde un día salimos, nacimos o donde nos mantuvieron, alimenticiamente hablando. Yo, sin ir más lejos, pierdo el culo cuando de viajar a la terriña se trata, y no concibo visitar esa tierra sin impregnarme del olor a tierra mojada y leña quemada que se respira en mi aldea, en la  parroquia de Tabeirós (A Estrada-Pontevedra), y que ya os presenté en el blog "Cocina Con El Otro Basket" el cual tengo algo aparcado debido a mis múltiples tareas. Pero como dije en otra entrada, queda mucha vida por delante y sin duda mi próximo pase a la Reserva en esto del baloncesto, ya que por fin somos junior de segundo año, traerá consigo el abandono progresivo de este blog y la dedicación exclusiva a los relatos familiares entre cacerolas, amén de otros proyectos también de poca monta que estoy cabilando.

Hórreo familiar

Pero no solo se vuelve a un lugar, también podemos regresar a estados emocionales que un día abandonamos por circunstancias puntuales como pudieran ser fracasos profesionales, afectivos o económicos, y que un cambio repentino de fortuna puede provocar ese regreso restrospectivo. Todas estas tendencias al regreso a lo mamado o vivido con pasión, involuntarias o no, están amparadas o recogidas dentro de las acepciones de lo que viene siendo la querencia, que es un término muy castellano-taurino y que en gallego podríamos relacionar con el de "morriña", aunque no significan exactamente lo mismo.

Un día un profesor de historia, murcianico él y tan buen profesor como buena persona, me hizo ver que todo en la vida está sujeto al movimiento pendular, también por supuesto en lo que al arte se refiere. Según el historiador del arte Wolfflinn, la historia del arte evoluciona según un movimiento pendular que le hace ir de una época clásica a una barroca, para regresar a lo clásico y después a lo barroco sucesivamente.

En esto del baloncesto murciano hay quien marca la tendencia por encontrarse en la cúspide, y en este momento parece que se encuentra en su estado emocional barroco, con interferencias en el mundo exotérico incluídas, dándose las condiciones tanto personales como emocionales para, por pura querencia, volver a posicionarse del lado del club que le dio de comer. Me consta que hubo retroalimentación, por lo que el regreso creo que es justificado. No obstante ya sabemos que el péndulo es a veces traicionero, y lo mismo hoy estás en la cúspide que mañana puedes ir a parar a la mismísima sentina.

Otra cosa son las adivinanzas con tendencia a la sentencia, que según quién las perciba pudiera considerarlas como acercamientos al posicionamiento actual del péndulo, más propias quizás de imitadores que de profesionales de la adivinación. Por otro lado no hay que caer en el error de que estas incursiones en lo exotérico alguien pudiera entenderlas como predistigitación, o el arte de hacer creer algo por medio de trucos o magia, ya sea de un color u otro.



Te voy a poner dos velas negras...



Yo por mi parte sigo prefiriendo la magia de colores oscuros, lo veo mucho más snob, y prefiero recurrir a otro tipo de invocaciones cuando de deseos hacia depende de quien se refiera, en lugar de andarme con profecías y otros sarcasmos pantagruélicos, siempre desde el cariño y sin acritud, claro.
 


 

En cuanto al partido que este pasado sábado ha enfrentado a nuestro CBC junior y al UCAM Murcia-96, no me gustaría dejar pasar por alto en primer lugar las reflexiones de nuestro entrenador Primi Abad al término del encuentro, referidas a la pésima semana de entrenamientos previa, dado que el día que más jugadores se dieron cita en la cancha fue de 6, y el viernes que estaban casi todos después de una semana plagada de exámenes, no fue el mejor entrenamiento que digamos.

David Álvarez vs. Sergio Muñoz

El partido comenzó con una toma de contacto de tú a tú, en la que el UCAM Murcia abrió una pequeña brecha ya que al contrario que el equipo cartagenero, ellos sí materializaban los ataques en forma de puntos, cosa que a nosotros se nos resistía. A mediados de este cuarto el CBC consiguió romper la mala racha finalizando el primer cuarto muy igualado y al descanso con 3 de diferencia para el CB Murcia. La dirección del equipo capitalino corría a cargo de David Álvarez que anduvo durante unos minutos bastante suelto y efectivo, como en él es habitual, hasta que el entrenador encargó su apresamiento a nuestro 7 Sergio Muñoz. A partir de ese momento David tuvo mayores dificultades para hacer su juego y romper nuestra férrea defensa que esta vez sí funcionó.

Incomprensiblemente y sin ánimo de poner en cuestión decisión alguna, más si cabe si esa decisión beneficia a mi equipo, David ocupó su puesto en el banquillo disfrutando de muy pocos minutos en la segunda parte, lo que contribuyó sin duda a que nuestra defensa fuera rota en menos ocasiones y que las recuperaciones fueran aprovechadas mediante ataques bien organizados y efectivos, donde todos nuestros jugadores tuvieron ocasión anotadora.

 

A este trabajo bien elaborado, sobre todo el desarrollado en el tercer y cuarto periodo, hay que añadir que por fin superamos el 50% en la anotación de tiros libres, así como que la defensa en zona establecida en el último cuarto se le atragantó al ataque murcianista. Dado que los últimos 3 minutos de juego el CBC contaba con una diferencia superior a los 10 puntos, los jugadores del UCAM Murcia no tuvieron más remedio que parar el juego tras las recuperaciones de balón a base de faltas, que como decía, gracias a la efectividad en el tiro, contribuyó a que el saldo a favor aumentara hasta la diferencia final de 15 puntos, que pone el basket average con 7 puntos a favor del CBC.

Fotografías de Antonio Céspedes

Esta victoria deja abierta la puerta a la posible clasificación, y todo pasa por hacer buena letra en los partidos próximos, especialmente el que nos enfrentará a Capuchinos en nuestra cancha.